La Palma que por más de 100 años estuvo en Paseo de la Reforma.
Fotos históricas ubican a la palma en lo que hoy es Paseo de la Reforma desde las primeras décadas del Siglo XX, por lo que investigadores consideran un logro haber vivido un siglo en condiciones distintas a las de su lugar de origen: las Islas Canarias. En esas islas y en condiciones de 10 a 500 metros sobre el nivel del mar, algunos ejemplares logran vivir hasta 200 años. La Ciudad de México se encuentra a 2 mil 400 metros sobre el nivel del mar y por sus condiciones climáticas y atmosféricas, las palmas no logran vivir tantos años y están sujetas a más vulnerabilidades.
¿Qué le sucedió a la palma?
Los primeros resultados que han dado los análisis de laboratorio procesados por el equipo asesor de especialistas muestran la presencia de un tipo de hongo que genera una afectación conocida como “la pudrición rosada de la palma”. Este hongo, entre otras cosas, causa un taponamiento que impide que el agua circule a lo largo del estípite (tronco).
Los análisis de otras partes de la palma siguen en curso; una de las hipótesis de los investigadores es que además del hongo ya identificado, pueden encontrarse otras infecciones ya detectadas en otras palmas del Paseo de las Palmas y diagonal San Antonio.
Las muestras de laboratorio aún están en proceso. El pasado 6 de abril, un grupo interdisciplinario de especialistas del Colegio de Postgraduados –institución reconocida como líder en ciencias forestales y agroalimentarias en México y América Latina– tomó muestras de suelo, raíz, tallo y hojas de la palma.
Los expertos aseguran que algunos de los factores que también influyeron en la muerte de la palma fue su edad. Como parte del programa de manejo integral de palmeras que realiza la Secretaria del Medio Ambiente del Gobierno de la Ciudad de México, se le dio atención para cuidarla con la debida asesoría de expertos, sin embargo, no fue posible salvarla.